Del canal de Telegram de Juan Zaragoza:
A estas alturas ya sabemos que la radiación que emiten nuestros WiFis, teléfonos móviles, dispositivos con Bluetooth, antenas de telefonía, luces LED, contadores de luz y agua inteligentes, etc. tienen un profundo impacto en nuestra salud, como veremos en breve.
Pero una de las preguntas que muchos de nosotros, que apagamos dispositivos por la noche, nos hacíamos era por qué nos despertamos entre las 3:00 y las 4:00 de la mañana.
En este vídeo encontramos una posible explicación. Es una vista satélite de la red NEXRAD de estaciones de radar de EEUU y en ella podemos apreciar cómo emiten pulsos a lo largo de toda la noche, que son mucho más intensos que la suma de todas las antenas de telefonía emitiendo de forma continuada.
Estas estaciones de radar emiten con una potencia de 750 Kilovatios a frecuencias que oscilan entre 2,7 a 2,9 GHz que está en la banda de las microondas (cercano al horno microondas que todos hemos usado alguna vez) y que tiene el mismo tipo de impacto en nuestra salud. Esta frecuencia sumada a los potentes pulsos tiene un impacto inmenso en nuestra salud. Inhibe la producción de melatonina (esto hace que nos despertemos) y vuelve permeable la barrera hematoencefálica con la consiguiente inflamación cerebral sistémica.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26300312/
Nuestro cerebro se muere poco a poco, noche tras noche, como consecuencia de esta radiación que no es casual, es por diseño y obedece a la guerra de 5ª generación que está sufriendo la población de todo el mundo. Aquí en España también.
El autor del vídeo también cita un estudio donde plantean el posible vínculo entre la radiación y el aumento de proteínas priónicas que se desdoblan y acaban acelerando procesos neurodegenerativos tales como alzhéimer, parkinson, encefalopatía espongiforme (vacas locas), etc. Lo vemos en la conclusión del siguiente estudio: El análisis de conglomerados reveló que la irradiación de microondas puede actuar como promotor en la formación de nuevas estructuras peptídicas mal plegadas del tipo de horquilla, que generalmente se asocian con la aparición de varios trastornos neurodegenerativos como el Alzheimer, el Parkinson, la enfermedad de Huntington y las enfermedades de Creutzfeldt-Jakob, así como ciertos tipos de cáncer como la amiloidosis.
https://pubs.acs.org/doi/10.1021/acs.jctc.9b01104
No es de extrañar que hayamos tenido un aumento exponencial de estas enfermedades, que también están ligadas a los brebajes del C0V1D.
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