La hija de Klaus Schwab es un engendro como su padre

Nicole Schwab: “Claramente, el sistema… no es sostenible. Este es el momento en el que realmente empezamos a posicionar a la naturaleza en el centro de la economía…Creo que ahí es donde tenemos que ir. También tengo la esperanza de que sea posible, pero creo que se necesitará mucha voluntad, tanto voluntad política como de los actores comerciales, para romper con los negocios como siempre… Y esto tiene que ver con el riesgo, y tiene que ver con el riesgo. y se trata de resiliencia porque los impactos que se avecinan serán aún peores si no lo hacemos ahora”.

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